Un mánager a la sombra de su memoria.
Entrar en la memoria de Carlos Vázquez, alias Tibu, es como entrar en una tienda de empeños caótica y destartalada, fiel al horror bacui de la desesperación o capricho de los que se deshacen de sus objetos más valiosos. La memoria de Tibu se apropia del oficio tasador que calcula el valor de toda su vida empeñada en la industria musical. El que propiciara que la música española de los años 80 –y décadas sucesivas– se convirtiera en leyenda acusa recibo desde la cárcel de Soto del Real (Madrid) del total de la factura. Dos años, tres meses y cuatro días, el tiempo suficiente para hacer balance de su pasado. Tibu, memorias de un mánager, publicado en Lince, es el libro de cuentas de toda una trayectoria vital y profesional dedicada a que otros alcanzaran los cielos de la fama, mientras él se perdía por los infiernos. Su autobiografía deja a un lado la memoria en B. No todo se puede justificar.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario