299.- Casta de suicidas

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Casta de suicidas de Lucian D. Teodorovici describe con humor los desvaríos de un treintañero




Un suicida que no encuentra aliento para matarse.



El protagonista de Casta de suicidas es un hombre de treinta años que vive en un modesto apartamento en el quinto piso de un bloque de viviendas. Cada día lleva a cabo un ritual: se sube a la repisa de la ventana y espera un impulso suicida que nunca llega. A lo largo de tres días el joven recorrerá los márgenes de la ciudad encontrándose con personajes estrafalarios, aspirantes a suicidas también, entre los que destaca el hombre que desea matarse contrayendo una enfermedad mortal acostándose con toda cuanta prostituta le sale al paso. Otro prefiere el buen whisky para llevar a término su fantasía. “Artistas del suicidio” los llama el protagonista. La novela está repleta de escenas memorables, de humor absurdo y desternillante, la risa desbaratada ante un mundo ridículo. Pero también la tristeza del payaso que entiende su condición e hombre fracasado.

Lucian Dan Teodorovici, nacido en Radauti, Rumanía, en 1975, es una de los autores más traducidos.Es escritor y guionista, redactor jefe del semanal Suplemento Cultural y coordinador de la colección «Ego. Proză» de la editorial Polirom. Fue redactor jefe de la misma editorial cinco años y colabora asiduamente en diversas publicaciones nacionales e internacionales. Dramaturgo, forma parte del equipo de guionistas de la serie Animat Planet. Se trata de una parodia animada concebida por el grupo de humoristas Divertis. También es guionista del documental televisivo Comunismo de andar por casa y coguionista de los cortometrajes Soy un vejestorio comunista (basado en la novela homónima de Dan Lungu), Bombones, Un buen día y En busca de ocas, todos ellos premiados por el Centro Nacional de Cinematografía de Rumanía.

Autor entre otras obras de las novelas Otras historias de amor, Instantes antes de la llegada de los extraterrestres entre nosotros, De pronto le pegué dos bofetadas o El mundo visto a través de un agujero del tamaño de un cigarrillo de marihuana, es la primera vez que publica en España.