Publicadas en el orden original establecido por Zweig, presentamos una nueva traducción de tres de sus novelas más conocidas.
En el otoño de 1926, la editorial Insel de Leipzig publicó el volumen Confusión de sentimientos. Tres novelas. Las tres Novellen (en castellano, «relatos largos» o «novelas breves») a las que alude el título cosecharon un éxito arrasador. Un año después de su publicación, el libro alcanzó los 75 000 ejemplares vendidos en Austria y Alemania. Despertó la admiración de autores consagrados, como Gorki y Thomas Mann, y el entusiasmo de Sigmund Freud. Todos coincidieron en que esas «tres novelas» pertenecían a un rango literario «de lo más superior».
Aunque de distinto tono y extensión, las tres narraciones giran en torno al tema del demonio de las pulsiones eróticas y de sus consecuencias en el individuo y en la sociedad. «Veinticuatro horas de la vida de una mujer», uno de los relatos más aclamados del escritor austriaco, describe las vivencias íntimas de una dama entrada en años que cree rejuvenecer cuando, súbitamente, se encapricha de un joven obsesionado con el juego de la ruleta. «Ocaso de un corazón» es un relato de corte existencial: un honrado padre de familia judío recibe una herida moral de su única hija, y ello tendrá consecuencias tan inesperadas como terribles. El relato que da título al libro, «Confusión de sentimientos», es un icono de la «literatura gay». Describe la dramática evolución de una historia de amor homosexual entre un profesor ya maduro y un joven alumno. Zweig se atrevió a tratar con valentía un tema tabú en su época. Esta exitosa «novela» contribuyó a dar visibilidad social al erotismo entre personas del mismo sexo, y denunció lo injusto del aislamiento y la marginación de los homosexuales de manera impactante y con unos personajes inolvidables.
Este nuevo volumen de relatos de Stefan Zweig prosigue con la iniciativa de Hermida Editores de publicar en castellano estas narraciones tal y como vieron la luz por primera vez en alemán: agrupadas en volúmenes autónomos, según la concepción inicial del autor. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario