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Arrastrado a formar parte de un movimiento de resistencia contra la megacorporación industrial Structus, un joven hacker llamado Sp4rx se encuentra de pronto enfrentado a la temible policía robótica, a individuos modificados cibernéticamente y a sus propios principios morales… cuando a lo único que él aspiraba era a un lugar donde caerse muerto. La primera novela gráfica de Wren McDonald es un relato de ascendencia ciberpunk donde la acción frenética, las preocupaciones políticas y el espíritu geek conviven para sentenciar el destino de la humanidad. (13,90 €, a la venta el 15 de febrero)
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La pareja, la familia, la infancia, la vejez. Las relaciones a distancia, las pérdidas y los reencuentros, la murga de la autoestima, los ilusorios estallidos de euforia y la decepción constante. La realidad no es un lugar confortable, pero a veces basta con rascar en la superficie para que brote una inesperada poética: la de estar vivo. Este libro contiene el mejor Adrian Tomine, el primero y el más conmovedor. Dieciséis historias cortas pero capaces de una intensidad emocional desacostumbrada. (13,90 €, a la venta el 22 de febrero)
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Centramina sufre el bloqueo del escritor, el temita de la página en blanco, un asunto espantoso que sólo presenta un arreglo: bajarse a la noche. Con el invertebrado Optalidón como escudero, nuestra protagonista emprenderá un viaje psíquico en busca de la palabra cegadora. Juntos vivirán una lujuriosa aventura de barrio en la que se dejarán empapar por los caldos de la existencia y le plantarán cara al destino, que por su parte se presentará inoportuno o premeditado, puntual o diferido, benévolo o puede que infame. El diagnóstico, en cualquier caso, será siempre la vida misma. El bicarbonato para mitigarla, el presente inmediato. El ahora. El ya. Una movida considerable. (12,00 €, a la venta el 22 de febrero)
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Una ciudad, una calle y personajes como los que nos cruzamos cada día, que se dejan llevar por la vida, de casa a la oficina y de la oficina a casa, desde que nacen hasta que mueren. Gente corriente que está ahí, pero ni siquiera la vemos. Lo único que importa es que hagan lo que se espera de ellos sin hacer mucho ruido. Pero, entre esta gente de a pie, los hay que parecen seguir disfrutando de la vida. Les gusta lo suficiente como para buscarle un sentido: encontrar la felicidad. Son pequeños revolucionarios, silenciosos y pacíficos. La gente corriente tiene vidas corrientes, tan ordinarias que tendemos a ignorarlas. Sin embargo, ellos mismos quieren contárnoslas. Lo cotidiano nunca deja de sorprendernos. (15,50 €, a la venta el 15 de febrero)
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