Si alguien decidiera crear una
lista de crímenes idiotas, un secuestro exprés en una isla sólo figuraría
después de un atraco a una comisaría o a un banco de semen.
Pues bien, precisamente un
secuestro exprés en una isla y cuya víctima es la hija de un empresario que
blanquea dinero para delincuentes de Europa del este, es el argumento de la
última novela de Alexis Ravelo, Las flores no
sangran (Alrevés).
El que fuera ganador del Premio Dashiell Hammett 2014 por su
anterior trabajo, La estrategia del pequinés, un tipo con un gran
sentido del humor y con el que da gusto charlar, está disponible para
entrevistas.
Un saludo.
Carmen
García-Trevijano
LAS FLORES NO
SANGRAN
ALEXIS RAVELO
Del autor de La estrategia del pequinés, Premio
Dashiell Hammett 2014
Si alguien
decidiera crear una lista de crímenes idiotas, un secuestro exprés en una isla
sólo figuraría después de un atraco a una comisaría o a un banco de semen. Y
eso es precisamente lo que deciden llevar a cabo cinco pequeños delincuentes
canarios. Lola, el Marqués, el Flipao, el Salvaje y el Zurdo, habitualmente
dedicados a la pequeña estafa y al hurto menor en Gran Canaria, deciden
embarcarse en un palo que se sale completamente fuera de su especialidad: el
secuestro exprés a la hija de un gran empresario local, Isidro Padrón, quien
dispone periódicamente de fuertes sumas en efectivo que él y su socio blanquean
para mafias del Este. Se trata de un plan infalible que además es muy sencillo
de ejecutar… sobre el papel. Por otra parte, desbaratar el plan de estos
malhechores de pacotilla entra dentro de lo factible para un hampón disfrazado
de empresario como Isidro Padrón, que cuenta con “profesionales”… pero sólo
sobre el papel.
Lo que todos ignoran es que en
apenas veinticuatro horas ninguno de ellos será como es ahora porque habrán
abierto la puerta del infierno.
Mézclese este meollo con ron
canario, agítese bien y el lector tendrá como resultado una novela explosiva y
tronchante que le llevará a encariñarse con unos personajes que producen
ternura desde el primer momento. Personajes que no cuentan con los métodos ni
la profesionalidad de sus perseguidores y que cometen errores de principiante,
pero en los que el lector se verá inmediatamente reflejado.
Las flores no sangran es
un libro para amantes de la novela negra y para aquellos que no lo son, porque
el genio de Alexis Ravelo convierte la novela negra en algo maravillosamente
negruzco, menos oscuro y más humano.
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