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lunes, 29 de junio de 2020

5.- Novedad de julio: "Polo de limón" de Íñigo Domínguez




POLO DE LIMÓN

 

Íñigo Domínguez

El verano es el auténtico paso a otro año, la Nochevieja está mitificada. Mucha gente deja a la novia o al marido en verano, o el trabajo, o la casa, o su ciudad, para coger fuerzas y a otra cosa mariposa. O decide hacer algo distinto con su cuerpo, o con el de otra persona, si le deja. Y a pesar de que se nos olvida cómo es, el verano es el momento en el que somos más conscientes de que esto que estamos viviendo lo recordaremos. No es, qué sé yo, abril o noviembre, que se traspapelan más. En verano hay más intención, más predisposición a interpretar el papel de estar vivo, esa responsabilidad: uno se esfuerza más por no hacer nada. Y se interroga más, se calibra si ha vivido plenamente, tan plenamente como los veranos que la infancia prometía. Ennio Flaiano, escritor perezoso y guionista de Fellini, resumía: «Solo hay una estación, el verano, tan bella que las demás giran alrededor».
Este verano de 2020 es especial, un reencuentro con la vida después de oscuros meses de invierno, y de primavera, encerrados en casa. Este año, más que nunca, llegamos al verano como a un oasis. Por eso este libro es una lectura ligera, refrescante y que se puede tomar a ratos, que se puede dejar y volver a coger como el aperitivo que te acompaña en una terraza, y espero que siempre apetezca, como un helado.
Íñigo Domínguez
Nacido en 1972, es periodista en El País y colaborador de Jot Down y del programa A vivir que son dos días, de la Cadena SER. Antes fue corresponsal en Roma durante casi 15 años para El Correo y el resto de diarios del grupo Vocento. En Libros del K.O. ha publicado Crónicas de la mafia (2014) y Paletos salvajes (2019), ambos dedicados al mundo del crimen organizado en Italia, y Mediterráneo descapotable (Un viaje ridículo por aquel país tan feliz) (2015), escrito en el verano en que estalló la crisis. Ha recibido los premios de periodismo Cirilo Rodríguez, en 2015, y Salvador de Madariaga, en 2016. No hay mucho que añadir sin aumentar aún más las falsas expectativas. De pequeño ganó un viaje en globo en un concurso de redacción y pensó que escribir podía servir para algo: daba perspectiva.
 

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