«Pocos autores logran expresar la realidad de este mundo inimaginable mejor que Yuri Buida».
THE TIMES LITERARY SUPPLEMENT
Tras la publicación de El tren cero hace algún tiempo, retomamos ahora la obra de Yuri Buida, sin duda uno de los autores más fascinantes de la literatura postsoviética. EnHelada sangre azul (2011), a través del personaje de la actriz Ida Zmorio el autor teje la historia de Chúdov, una ciudad inventada a pocos kilómetros de Moscú que, sin embargo, parece anclada en la Edad Media. Una vez más, Buida es capaz de ofrecer un tremendo ejercicio narrativo repleto de alusiones literarias, personajes peculiares y extraños acontecimientos.
Tres de la mañana. Ida se levanta de la cama, se enfunda el pesado abrigo negro y, tras colocarse su estrambótico sombrero, sale corriendo a la calle. Avanza a trompicones bajo la lluvia con una sola idea fija en la cabeza y un único destino: la jefatura de policía de Chúdov. A ello dedica sus últimas fuerzas, no puede esperar, es demasiado urgente. Cae, como tantas veces antes, e igualmente se levanta. Ya queda poco, la plaza, el restaurante, la farmacia, correos..., ya está, ya llega. Sube al porche y golpea la puerta con insistencia, pero, mientras esta se abre, la mecha se agota y, respirando con dificultad, Ida, la vieja Ida, se desploma ante el mayor Parátov. Mueve la boca desesperada, intenta hablar, pero no dice nada.
Tras ella queda una vida envuelta en misterio... ¿Quién es Ida Zmorio?, ¿tal vez la gran actriz que enamoró a una generación de soldados y fue galardonada con el Premio Stalin?, ¿o la esposa de un aristócrata que huyó de la URSS?, ¿quizás la solitaria y distante mujer que regresó a aquel pueblucho llamado Chúdov para dar clases de interpretación a las niñas?, ¿sería acaso Ida la clave del rompecabezas que comenzó con la desaparición de una de sus alumnas, o solo la última víctima?
Helada sangre azul recoge una extensa lista de grandes temas a considerar, como la muerte o el sentido de la vida, plagados de elementos góticos, pesadillescos e, incluso, fantásticos; no en vano Yuri Buida ha sido a menudo comparado con los realistas mágicos de América Latina.
Yuri Buida (Znamensk, 1954) desciende de inmigrantes de origen ruso, polaco, bielorruso y ucraniano. Sus obras otorgan un importante peso a cuestiones como la identidad, la pertenencia, la transitoriedad o los maltrechos vínculos con el pasado. En su universo literario reaparecen los mitos fantásticos; por sus páginas desfilan suspicaces militares, enemigos del pueblo, locos visionarios y magos; la amaenaza, los secretos y la muerte acechan tras cada esquina, pero su particular estilo rebosa una vitalidad y un humor feroces. Ha sido galardonado con el prestigioso premio Apollon Grigóriev, así como con el Student Booker Prize y el Znamya Literary Magazine Prize por Helada sangre azul.
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