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La vida viene a cuentoRelatos de ecología emocional
Jaume Soler y M. Mercè Conangla
«Chuang Tzu contó la historia siguiente: —Había una vez un hombre que tenía miedo de su sombra y que renegaba de sus huellas. Quiso huir de ellas pero, cuanto más corría, más huellas iba dejando, y por mucho que corriera su sombra no se separaba de él. Entonces, creyendo que el problema estaba en que no corría lo bastante deprisa, corrió lo más velozmente que pudo y no paró de correr hasta que murió agotado. Aquel hombre ignoraba que, poniéndose a la sombra, la sombra desaparece, y que permaneciendo en quietud no se dejan huellas.»
Breves, directos y profundos, impregnados de sabiduría y sensibilidad, los relatos que Jaume Soler y M. Mercè Conangla han agrupado en este libro nos enfrontan a preguntas esenciales sobre cómo vivimos, cómo nos relacionamos y qué sentido damos a nuestra vida.
150 relatos de la Ecología Emocional para aprender a vivir felices con nosotros mismos y a convivir en plenitud con los demás.
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Guía de campo de la flora
de la Serra de Vandellòs, la Vall de Llors i l'Hospitalet de l'Infant. Con más de 350 especies diferentes de plantas.
Agustín García y Roberto Bueno
En el litoral de Tarragona, a medio camino entre la capital y el delta del Ebro, existe un pequeño territorio donde la luz del Mediterráneo alimenta a flores y arbustos, retamas y plantas, con aromas exquisitos. Paraíso de la flora mediterránea, promiscua en colores y olores, la Serra de Vandellòs, la Vall de Llors y la costa de L’Hospitalet de l’Infant albergan una flora excepcional que explota cada primavera para emborrachar al caminante.
Tiñen los campos romeros y brezos, tomillos y madreselvas, amapolas y orquídeas, jaguarzos y rosales silvestres… Una lista interminable y embriagadora, que convierte este territorio en un paraíso para botánicos, y en un oasis para el senderista que disfruta con la soledad de la naturaleza.
Esta Guía de campo quiere dar a conocer a paisanos y foráneos este patrimonio vegetal, para que la contemplación, el aprendizaje y la comunicación ayuden a preservarlo como se merece.
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