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martes, 1 de junio de 2010

2.- “TURIA” PUBLICA UN RELATO INÉDITO DEL GRAN ESCRITOR NORTEAMERICANO JOHN CHEEVER

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ESTÁ CONSIDERADO COMO UNO DE LOS PADRES DEL CUENTO MODERNO


El gran escritor norteamericano John Cheever, considerado como uno de los padres del cuento moderno, será uno de los principales protagonistas del nuevo número de la revista cultural TURIA. Una entrega que va a ser distribuida este mes de junio y que cuenta, entre sus contenidos más destacados, con la publicación de un relato de Cheever inédito en España: “Río de otoño”. Se trata de un texto publicado originalmente en 1931, en la revista “The Left”, y que formará parte del libro “Fall River” que dará a conocer Tropo Editores este próximo otoño.

“Río de otoño” es un relato ambientado en los años de la Gran Depresión, que narra con sencillez no exenta de desgarro y desolación, los efectos de la crisis industrial en una ciudad norteamericana. Un texto que, dada la actual coyuntura socioeconómica internacional, puede también ser leído como un certero retrato del clima de desasosiego que se vive ahora en cualquier lugar de Occidente afectado por esa lacra cruel que es el desempleo masivo. De ahí que el cuento de Cheever comience con un párrafo que no deja lugar a equívocos sobre la gravedad del panorama que se nos describe: “La gente lo sabía desde hacía dos años, pero se hizo evidente en invierno. Las fábricas habían parado y las grandes ruedas permanecían inertes contra los techos. Los telares bloqueaban el pavimento como maquinaria inservible en un viejo teatro de ópera. En el suelo, en las vigas y en los brillantes flancos de acero, la niebla de la trama se había cubierto de un polvo como nieve vieja”.

Cheever, que con el tiempo sería descrito por la crítica literaria como el “Chejov de los barrios residenciales”, aborda en este relato la candidez de las pequeñas utopías que animan a la gente humilde. Esa ingenua confianza de los trabajadores en que algo sucedería, que los rituales de la primavera vencerán al fin la crueldad invernal de un horizonte en el que las chimeneas “se disparaban contra el cielo vacío desprovistas de sus negros penachos de humo”, en el que “mucha gente no podía pagar el alquiler y la casera amargaba el silencio con sus lamentos”.

No eran los únicos, nos dirá Cheever en su cuento: “En Boston la gente adinerada estaba inquieta. La primavera había llegado, pero nada había cambiado. Estaban aterrorizados por la perspectiva de tener que pasar por todo aquello otra temporada, por haber luchado todo el invierno en busca de los placeres de inviernos pasados. En Boston la gente adinerada se veía condicionada como antiguos caballeros. El nervioso naufragio de una raza muerta”.

Esa época de tradicional bonanza que es la ansiada primavera resulta, para algunos, como un nuevo y flamante coche nuevo. Para otros, un sueño, una quimera, que pretenden que vuelva como esos “firmes brotes amarillos despuntaban de la tierra dura”. Al fin, como si
participaran en





un ritual de autoestima de quienes buscan convencerse a sí misma, los protagonistas nos dirán: “vuelve a ser primavera”.

“LA LITERATURA, TAL VEZ, PUEDA SALVAR AL PLANETA”

En John Cheever (Quincy, Massachusetts, 1912 – Ossinning, Nueva York, 1982) biografía y literatura, vida y obra se complementan sin fisuras. Es la suya una narrativa que nos habla de las miserias, contradicciones e ironías de la vida contemporánea, una escritura que indaga en las heridas más íntimas de la sociedad de la que forma parte. Porque, como confesaba el propio autor, “yo trabajo con la intuición, la aprensión, los sueños, los conceptos”.

Hay quien subraya que los cuentos de Cheever podrían considerarse una suerte de comedias de costumbres, sutilmente elaboradas, que muestran una sincera preocupación por la levedad de la vida social y la derrota espiritual y emocional de la gente corriente. Los relatos de Cheever encontraron pronto su hueco en numerosas revistas y periódicos norteamericanos, siendo la prestigiosa revista “The New Yorker” el medio con el que mantuvo más fluida y perenne relación. En 1979 ganó el premio Pulitzer de literatura por la edición completa de sus cuentos. Anteriormente, en 1957, su primera novela “Crónica de los Waspshot” había obtenido el National Book Award. Fue también célebre la versión que el cine hizo de uno de sus mejores relatos, titulado “El nadador” y que protagonizó Burt Lancaster en 1968.

Cheever siempre postuló su confianza en la literatura como fuerza redentora: “La literatura es el único sitio donde podemos refrescar nuestro sentido de posibilidad y nobleza. (…) es el único registro continuo de nuestra lucha por ser ilustre, un monumento de peregrinaciones, un vasto peregrinaje (…). Una página de buena prosa me parece la forma más seria de diálogo que hombres y mujeres bien informados pueden llegar a tener en su intento de hacer que los fuegos de este planeta continúen ardiendo en paz (…). La literatura, tal vez, pueda salvar al planeta”.

Ahora la revista TURIA ofrece a los lectores una nueva oportunidad de sumergirse en el territorio Cheever a través de la traducción al castellano de uno de los relatos de su primera época.

TURIA es, con 27 años de trayectoria y periodicidad cuatrimestral, una de las publicaciones culturales españolas más veteranas y reconocidas, por cuya labor obtuvo el Premio Nacional al Fomento de la Lectura.

Raúl Carlos Maícas
Director
Revista Cultural TURIA