HORMIGUERO: AMOR Y PODER EN EL INTERIOR DE UN CONVENTO
Hormiguero es una de las últimas novelas de Margit Kaffka y en ella relata los entresijos de la vida de un convento en el que la muerte de su priora, y el proceso de selección de quien la sucederá, desencadena un verdadero terremoto que hará temblar a la congregación. Margit Kaffka nació en Nagykároly, el 10 de junio de 1890, hoy en territorio rumano con el nombre de Carei, y falleció de gripe en Budapest con sólo 28 años dejando sin embargo una abultada obra en su país que se traduce por primera vez al español.
Margit Kaffka está considerada, como una de las poetas y escritoras más significativas de la literatura magiar, junto con Dezsó Kosztolányi, Géza Csáth, Sándor Márai o Guyla Krúdy. Desde el comienzo de su carrera literaria formó parte del círculo de Nyugat, –la revista Occidente–, que reunía a los intelectuales centroeuropeos. La autora estudió becada en el convento formador de profesores de las Hermanas de la Caridad de Szatmár, de donde extrajo material para algunas de sus obras. Este es el caso de Hormiguero, novela en la que Kaffka describe el mosaico de intereses, lenguas, etnias y corrimientos de fronteras que caracterizaron el peculiar desmembramiento del Imperio Austrohúngaro, en Centroeuropa, dentro de un microcosmos que efectivamente recuerda en su aislamiento y voluntad febril de trabajo, oración y disciplina a un hormiguero. En el espacio cerrado del convento, Kaffka refleja estas convulsiones sirviéndose de los personajes de unas monjas procedentes de Moldavia, Alemania, Eslovaquia que se instalan en Hungría. Hormiguero reproduce en parte el trastorno geopolítico de la zona, su estratificación social, y las servidumbres de la época. Un tiempo que se escapa y que hasta las hermanas más reticentes deben reconocer tan perdido, como las dotes de las novicias que se retractan y huyen para seguir a un hombre. Y un espacio cerrado que exige por un lado la contención y la disciplina de los afectos y por otro propicia los enamoramientos más apasionados.
“Virginia, la bella italiana, pronto descubrió que la Vieja escondía tras la tiranía militar y el enfado malhumorado, una ternura secreta y pudorosa cuyo objeto eran las hermanas jóvenes e inteligentes. Al principio, coqueteó un poco con ella, pero más tarde, cuando ya no la necesitó, comenzó a parecerle pesada la veneración torpe de la vieja monja, que casi se derretía en presencia de ella…”
Luchas de poder, facciones y lealtades están plasmadas sin mojigatería, con un lenguaje rico y persuasivo, que envuelve al lector en el sensual embrujo provocado por la magnifica descripción de la belleza y los anhelos de quienes viven tras las tapias conventuales.
Valencia, agosto de 2009
El Nadir
www.elnadir.es